En forma

Consejos para tener un busto más firme:

Muchas veces nos preocupamos por cuidar con mayor atención nuestro rostro o nuestras manos y damos por sentado que las otras partes del cuerpo están bien. Es más, cuando nos echamos la crema hidratante en el cuerpo después del baño no le damos atención a la zona del pecho y asumimos que nuestros senos están bien porque, simplemente no los vemos descolgarse, aún.

Debemos ser conscientes que la caída del busto es un hecho que nos va a pasar a todas, así que lo mejor es prevenir que lamentar. Actualmente existen métodos para reafirmar el pecho, sin necesidad de recurrir a la a veces molesta cirugía, y también ejercicios caseros que puedes realizar para darle más fortaleza a tus pechos.

Una opción médica que existe, y que puedes consultar en tu clínica de cirugía local, es la aplicación de inyecciones en el área del busto para lograr una piel más tersa y rellena. Esto se da porque se combina la acción hidratante del colágeno y el ácido poliáctico. Consiste en dos sesiones que irán poco a poco haciendo a la piel recobrar su elasticidad.

Otra opción que está disponible en el mercado y es mucho más accesible, es el uso de cremas específicas para el área del pecho. Existen varios productos, así que debes elegir el que estimule la reparación de la piel y también que evite las arrugas y te proteja de los rayos solares. Otro aspecto que debe tener el producto, es que debe darle elasticidad a tu piel y la fuerza para prevenir el descolgamiento de los senos.

También existen cremas creadas para cuello y pecho que tienen un efecto lifting, es decir, que son ricas en proteínas y estimulan la síntesis de colágeno y elastina. Cuando elijas algún producto para tu pecho ten en cuenta todos los aspectos mencionados anteriormente.

Y para complementar el cuidado que merece tu busto, puedes hacer ejercicios caseros a la hora de levantarte, que te ayudarán a reafirmar los músculos de tu pecho.

Puedes empezar sentándote en el piso, colocando tus manos en posición de rezo y separando las muñecas. Sentirás cómo se ejercitan tus senos. Repite este ejercicio unas 15 veces y luego puedes ir aumentando las repeticiones.

Otro ejercicio sencillo es, estando sentada en el piso, estirar los brazos delante tuyo y juntar las palmas de tus manos. En esa posición sube tus manos por encima de tu cabeza y luego regreśalas a la posición original. También debes hacer aproximadamente 15 repeticiones. Este ejercicio favorecerá también los músculos de tu espalda y tu postura.

Trucos para cocinar reduciendo calorías en tu dieta

Como ya sabemos, el disminuir el número de calorías en nuestra alimentación diaria nos ayudará a perder peso de forma saludable. Esto no significa que debamos comer menos, de lo que se trata es de sustituir algunos alimentos por otros de igual o más valor alimenticio pero que “no” engorden.

El método que escojamos para prepararlos, los instrumentos que utilicemos e incluso pequeños cambios en nuestras recetas de siempre, pueden significar un gran ahorro de calorías sin que apenas lo notemos. Incluye los siguientes consejos al momento de preparar tus comidas, te aseguramos que con el paso de los días el cambio será evidente en la báscula y en tu ropa:

  • Usa una sartén antihaderente, así podrás usar casi la mitad de aceite que si cocinas con otro tipo de sartén.
  • Utiliza un dosificador en spray para el aceite. Así lo distribuirás de forma uniforme y en menor cantidad, por lo que puedes reducir el aceite que empleas a la mitad. De esta forma puedes ahorrar más de 100 kcal en cada uso (frituras, ensaladas, etc).

  • Utiliza el horno para cocinar los “fritos”. Patatas fritas, tortilla, nuggets, albóndigas, etc., pueden cocinarse de forma sana y menos calórica en el horno sin necesidad de aceite.
  • Las nuevas bolsas para horno o microondas, te permitirán cocinar en “su jugo” sin emplear apenas aceite, así tus platos quedarán muy jugosos y sabrosos.
  • El papel de cocina anti-grasa, ayuda a eliminar el exceso de grasa de las patatas fritas, croquetas u otros fritos, lo que te puede significar el consumir menos aceite.

  • Prepara tortillas extraligeras sin aceite ni sartén: Coloca los huevos batidos en un molde e introdúcelo en el microondas durante 2 minutos a media potencia. Obtendrás una tortilla ligera y sabrosa.
  • Emplea frutos secos en lugar de pan rallado. Muélelos en un mortero o con la picadora. Pasa el alimento (pollo, pescado, filete, etc) y después por los frutos secos. Cocínalo en el horno, así el ahorro de calorías será mayor.
  • Apuesta por los marinados y macerados. Las hierbas aromáticas como tomillo, orégano o albahaca, potencian el sabor de los alimentos y hacen que estos queden más jugosos sin necesidad de freírlos.
  • Utiliza tu creatividad para preparar salsas. Por ejemplo, sustituye la nata por una bechamel ligera (preparada con leche semi-desnatada), o utiliza una ligera salsa de frutas para carnes y aves.
  • Introduce verduras en tus hamburguesas. Prepáralas utilizando la mitad de carne y añadiendo vegetales picados (zanahorias, guisantes, calabacín, etc).